Abraira tiene ese aire de serenidad, de hombre que no necesita hacer grandes gestos para transmitir emociones profundas. Su voz y su interpretación son más que suficientes.
En cada presentación, en cada concierto, se notaba ese compromiso con su música y su público.
No era solo un cantante, era un contador de historias, y esas historias siempre iban directas al corazón.
Pablo Abraira es, sin duda, un referente de la música romántica en español.
Un hombre que supo encontrar su nicho y quedarse en él, cantando al amor, al desamor, y a todas esas emociones que nos hacen sentir vivos. Y aunque es cierto que no tuvo una carrera llena de éxitos masivos, lo que hizo, lo hizo bien. Sus canciones siguen siendo recordadas y tarareadas, y eso ya es un logro que muchos artistas quisieran.
Así que, la próxima vez que escuches Gavilán o Paloma, recuerda que detrás de esa voz está un hombre que vivió cada palabra que cantaba, un romántico empedernido que sigue siendo parte de la banda sonora de nuestras vidas.
Comentarios
Publicar un comentario